En esa bolsa de recuerdos que es la infancia uno va amontonado imágenes casi sin darse cuenta. Para mi el fútbol era, y fue por mucho tiempo, la cancha del Club Atlético Sarandí y su camiseta verde, blanca y roja; el tinglado para la cantina y los eucaliptos cerca de la línea lateral. Y mi primer arquero fue Osvaldo con su inabarcable altura y su gorra "de arquero"
Hoy vamos a tener que reforzar la línea de cuatro porque quedamos con el arco vacío.
Un abrazo.
No sabía de la existencia de este relato. Lo encontré sin querer y se me complicó aguantar las lágrimas.
ResponderEliminarEs hermoso Pablo, gracias!